Sibenik

"Otro tesoro de la costa Dálmata"

Un sin fin de maravillas se dispersan a lo largo de la costa croata; Hermosos parques naturales, ciudades patriomonio de la humanidad y bellas islas de aguas transparentes, forman parte de esta atractiva parte del país.

Uno de esos lugares es Sibenik, una vieja urbe con mucho que ofrecer.
Es la ciudad más antigua fundada por dalmatinos nativos, algo peculiar, ya que la mayoría de poblaciones de la zona fueron establecidas por Ilirios, Griegos y Romanos.
De todas maneras se han realizado excavaciones en el Castillo de San Miguel que demuestran que esta región estuvo habitada mucho antes de la llegada de los dalmatinos.

Sibenik ha sido objeto de numerosas disputas. Consiguió aguantar las envestidas de los venecianos hasta 1412 y un poco más tarde, a finales del s.XV, fueron los otomanos quienes intentaron conquistarla sin éxito. Y aunque parece que esto queda muy lejos, ha sido más recientemente cuando la ciudad ha sufrido una de las peores agresiones de su historia. En 1991 fue duramente atacada por el ejército yugoslavo como ofensiva lanzada para evitar la independencia de Croacia.

Para mantener a raya al invasor se construyeron numerosos elementos defensivos como el ya mencionado Castillo de San Miguel,  el de San Juan, el de Suvicevac y el de San Nicolás, éste último situado sobre el mar, a la entrada del canal que da acceso a la ciudad.
También se pueden observar restos de la muralla que protegía la ciudad vieja, a la cual podemos acceder a través de alguna de las antiguas puertas que aún se conservan.

Atravesar esos muros es meterse de lleno en un laberinto de callejuelas de piedra pulida salpicado de viejas casas, plazas, iglesias y algún que otro palacio.
Entre la Plaza Gradska Vjecnica (Plaza de la República Croata) y la Plaza Pelegrini, rodeadas ambas de palacios barrocos de estilo veneciano, se ubica la joya de la ciudad, la Catedral de St. James, el edificio renacentista más importante del país.
Este bello templo de planta de cruz latina fue declarado en 2001 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Ha sufrido una importante restauración que la ha convertido en la catedral más limpia y mejor conservada de Croacia, pero yo creo que ha debido ser sólo por fuera, porque por dentro todavía necesita un poquito de abrillantador.
En el exterior fíjate en el friso adornado con 74 cabezas diferentes que representan a los ciudadanos más notables de aquella época.

También en la Plaza Gradska Vjecnica, llama la atención el bonito edificio con soportales y balcón acristalado de mediados del s.XVI que perteneció al antiguo ayuntamiento. Fue destruido en 1943 por los bombardeos que sufrió la ciudad, pero ha sido totalmente reconstruido y hoy día alberga un restaurante.

Dentro del casco viejo también es importante mencionar el Teatro de Sibenik (1870), el más antiguo del país que aún sigue en funcionamiento, y el único de Croacia construido gracias a la financiación de los propios ciudadanos.

Reportaje de Junio de 2011

Sube al atardecer al Castillo de San miguel (unos 3€), la visita en sí no dice mucho, pero las vistas que obtendrás desde sus murallas harán que merezca la pena la entrada.

La región de Sibenik es una auténtica maravilla natural. Además de poseer hermosas playas, cuenta con dos parque naturales totalmente diferentes situados a tan sólo 50 km el uno del otro.
Yo no pude visitarlos, pero por lo que he visto y leído, creo que aconsejarlos no está de más.

El Parque Nacional de Krka (entrada 11€) está a 10 Km de Sibenik.
Cuenta con una extensión de 109 Km cuadrados en los que el río Krka se convierte en el principal protagonista al formar lagos y cascadas cársticas de muy bella factura.
Si has estado en el Parque Nacional de Plitvice verás ciertas similitudes, ya que ambos se han originado de la misma manera (por la sedimentación del travertino, un tipo especial de piedra caliza).
Lo bueno de este parque con respecto al de Plitvice, es que aquí sí te puedes bañar, y eso en veranito es un punto bastante positivo.
En el parque también podremos ver diversos monumentos históricos; Viejos molinos, castillos en ruinas, restos de una antigua ciudad romana (Burnum), un extraño Monasterio Ortodoxo y un Convento Franciscano situado en un islote en medio de un lago, que alberga una pinacoteca y una iglesia del s.XIV.

El Parque Nacional de Kornati es un archipiélago formado por 152 islas, islotes y peñascos rodeados de aguas transparentes.
En varias de ellas encontrarás restos de fortalezas venecianas. Otras pueden parecer simples piedras grandes en medio del mar, pero algunas de ellas, como es el caso de Purera, están protegidas porque su flora puede ser única en el mundo.
El parque no es sólo un paraíso para los amantes de la naútica, también los senderistas podrán disfrutar de este magnífico paraje.
Los fondos marinos son muy atractivos y están llenos de vida, pero sólo está permitido explorarlos contratando una excursión con una empresa autorizada.
La belleza de este lugar ha sido fuente de inspiración de los más destacados escultores, arquitectos, músicos y escritores de Croacia.
El escritor irlandés Bernard Shaw escribión sobre este lugar: "El último día de la creación, Dios quiso coronar su obra y creó las islas de Kornati de las lágrimas, de las estrellas y del aliento".